Lindsay Lohan sigue haciendo de las suyas en Brasil, mientras se encuentra promocionando una línea de ropa. Luego de tener que esconderse debajo de una mesa para zafar de los periodistas en un boliche, en las últimas horas casi muestra todo por un incidente.
Las celebridades se jactan de tener centenares de pares de zapatos de las marcas más exclusivas, los vestidos de diseños de vanguardia y peinados de seis cifras. Pero al parecer, hay algo que todo el dinero de Hollywood no puede comprar: corpiños.
Lindsay Lohan quiso llegar a Florianópolis en Brasil con mucho glamour. Para ello eligió unas buenas gafas de sol y un vestido gris muy fino que combinó con una elegante cartera.
Sin embargo, al bajar del helicóptero casi queda expuesta y muestra uno de sus senos.
Claro que no sería la primera vez que el público fuera presentado ante sus partes privadas ni sería ella la primera de las famosas en hacerlo.
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